Free! Why $0.00 Is the Future of Business es un gran artículo escrito por Chris Anderson, el editor jefe de Wired, que analiza como en una economía como internet en la que los costes de producción tienden a cero, el futuro de los negocios es ofrecer productos gratuitos. Comienza el articulo, que posteriormente se convertirá en libro, explicando donde empezó todo. Según Anderson fue a finales del siglo XIX cuando Gillete descubrió que regalar las maquinillas de afeitar era la mejor manera para vender sus hojas. En este modelo un producto (la hoja), subsidiaba a otro (la maquinilla). Otro ejemplo muy conocido es lo que hizo Radiohead regalando su disco en Internet, que gracias a la repercusión que tuvo acabaron vendiendo más discos de los que habían vendido con el álbum anterior.


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En arquitectura podríamos reducir los costes de producción al mínimo utilizando soportes íntegramente digitales. Y ofrecer asesoramiento, ideas y propuestas gratis. La gratuidad de las propuestas permitiría colgarlas en Internet en su formato mas abierto (archivos de autocad(.dwg), photoshop (.psd),etc.) y con la licencia Creative Commons mas permisiva (en la que solo hay que poner el autor). Este podría ser un primer paso para implementar el código abierto en arquitectura. Lo relevante no es solo que las ideas sean gratuitas sino que sean abiertas, dos factores íntimamente asociados que proporcionan la libertad necesaria tanto para el proceso creativo como para el desarrollo de una actividad económica viable.

Los contenidos digitales fluyen por las redes con enorme facilidad haciendo muy difícil su contención detrás de barreras jurídicas o tecnológicas. Los usuarios se asombran de esta nueva e inesperada exuberancia y reinventan sus interacciones con los contenidos. En ocasiones, los creadores de contenidos que ya nacen digitales entienden el nuevo medio e invitan a otros a que se re-apropien de su obra para darle nuevas vidas. En este camino es posible reinventar modelos de negocio.

El valor de las ideas únicas y exclusivas ya no tiene sentido, lo realmente valioso ahora mismo es nuestra capacidad para conectar ideas, la inteligencia colectiva.

Después de realizar la prueba piloto (O.G.A) en el festival EME3 COLLAPSE en Barcelona estas fueron algunas de las conclusiones:

* ausencia de barreras en la relación cliente-arquitecto y un aumento de competitividad positivo para la profesión: una de la cosas mas evidentes de esta prueba piloto en Barcelona es que la gratuidad rompe barreras. La gente que se acercaba le costaba creerlo pero cuando lo confirmaban entraban a contarnos sus proyectos con todo detenimiento. En arquitectura muchas veces se hacen anteproyectos gratis, pero muy pocas veces se deja claro desde el principio. Esta situación limita las posibilidades de un cliente para consultar a otros arquitectos y elegir la opción que más le interese.

* crisis y “do it yourself”: En una situación económica como la actual muy poca gente puede permitirse realizar un proyecto arquitectónico a la manera tradicional. Desde la oficina gratuita hemos podido asesorar en proyectos tipo “do it yourself” (haztelo tu mismo) para que cualquiera pueda construirse su propio proyecto.

* promoción: todo el mundo tiene un proyecto arquitectónico pendiente, y la posibilidad de dar un primer paso sin coste alguno atrae a muchísima gente, sin ir mas lejos en la prueba piloto que duró tres días tuvimos 8 clientes potenciales.


VIA: O.G.A.